por Sor Lucy Thorson
Actualmente desarrollo mi ministerio en ámbito local e internacional. En la archidiócesis de Toronto me dedico a la educación de adultos: enseño y creo programas para ayudar a los adultos de diversas comunidades religiosas a comprender y apreciar mejor el judaísmo, el pueblo judío y diversos aspectos de la larga historia de las relaciones judeocristianas. Soy miembro activo del Consejo Ejecutivo del CJDT (Diálogo Judeocristiano de Toronto). A nivel congregacional, soy asesora del Equipo de Relaciones Judeocristianas de nuestra congregación NDS, cuyo propósito es apoyar e impulsar en toda nuestra congregación NDS el encuentro, el diálogo y la acción entre judíos y cristianos. Actualmente sigo siendo la coordinadora del Equipo de Ministerio Itinerante en lengua inglesa de nuestra congregación, que promueve las enseñanzas bíblicas y judeocristianas en Zimbabue, Malta y Kenia.
Las relaciones judeocristianas son una de las pasiones que guían mi vida
Busco cualquier ocasión propicia para trasladar o transmitir nuestro carisma de Sion a los demás, ¡y lo disfruto! Soy canadiense y entré en las hermanas de Sion en 1960 en Saskatoon. Después de mi noviciado, obtuve una licenciatura en Letras y un diploma de enseñanza secundaria en la Universidad de Saskatchewan y en la Universidad de Manitoba. Durante unos siete años me dediqué a la enseñanza y al asesoramiento de alumnos de secundaria en Moose Jaw y Edmonton.
En 1973 fui a Jerusalén a estudiar un año… ¡y acabé viviendo allí dieciocho años! Durante ese tiempo, viví y ejercí mi ministerio en tres lugares diferentes de Sion: Ecce Homo, Ratisbonne y Ein Karem. Estudié en la Universidad de Jerusalén y obtuve un máster en Teología y Estudios Judíos, centrado en la liturgia judía. Durante siete años fui responsable provincial de la provincia mediterránea de NDS y enseñé en el Programa Bíblico de Ecce Homo. En Jerusalén viví tanto en la zona judía israelí como en la árabe palestina musulmana y cristiana. En este contexto interreligioso experimenté lo necesarias que son la reconciliación y la sanación en muchas situaciones complejas. A menudo las fuertes palabras de Isaías 66:10 resonaban en mi corazón y mi mente; su mensaje es: no podéis alegraros por Jerusalén si antes no os habéis condolido con ella y con todo su pueblo.
Fui a Jerusalén a estudiar un año… y, ¡acabé viviendo allí dieciocho años!
En 1991 regresé a Toronto (Canadá) durante dos años para cursos de actualización de mis estudios teológicos. En 1993 fui a Roma, donde permanecí catorce años. Fui directora de nuestro Centro SIDIC (Centro Internacional para las Relaciones Judeocristianas) de la NDS durante diez años. Tras ese ministerio en el SIDIC, enseñé y planifiqué programas durante cuatro años en la Universidad Pontificia Gregoriana, en el Centro Cardenal Bea. Fue muy estimulante y gratificante compartir información sobre el judaísmo, el pueblo judío y las relaciones judeocristianas con estudiantes de todo el mundo. También formé parte de la Comisión Diocesana de Roma para las Relaciones Judeocristianas y del Comité Vaticano encargado de preparar las iniciativas judeocristianas para el año jubilar del 2000.
En 2007 regresé a Canadá, donde he seguido participando en las relaciones judeocristianas a nivel local y nacional. También soy miembro activo del Equipo de Desarrollo y Paz de nuestra parroquia.
Estoy muy agradecida por los muchos dones que he recibido en Sion
Estoy muy agradecida por los muchos dones que he recibido en Sion, en particular, por nuestra internacionalidad y por las palabras siempre desafiantes e inspiradoras de nuestro Fundador, el P. Théodore Ratisbonne: “Encomiéndalo todo a Dios, y avanza con confianza, como si estuvieras segura del futuro”.